¿Tengo que ser muy flexible para hacer Yoga?

Una de las preguntas más comunes que recibo es: “¿Tengo que ser muy flexible para hacer yoga?” Y la respuesta es clara: no.

La práctica del yoga no se trata de cuán lejos puedes llegar en una postura, sino de cómo te sientes en ella. La flexibilidad mejora con el tiempo, y cada cuerpo es único. La diferencia en la elongación entre una persona y otra tiene que ver con muchos factores: genética, edad, nivel de actividad física, estructura del tejido conectivo, incluso la hidratación, la alimentación y el manejo del estrés.

Así que tranquila. Si hoy no llegas con las manos al suelo o no puedes mantener ciertas posturas por mucho tiempo, no te frustres. La práctica constante de yoga y los estiramientos irán suavemente mejorando tu movilidad y elasticidad. Pero recuerda: el objetivo del Yoga no es ser más elástica, sino conectar contigo misma, relajar tu mente y encontrar un espacio de calma interior.

Paciencia, constancia y cariño por tu cuerpo. Esa es la verdadera práctica.